Las cláusulas abusivas son aquellas que se incluyen en los contratos de adhesión de forma unilateral y que generan un desequilibrio entre las partes. Estas cláusulas son contrarias a la buena fe y a las normas de protección de los consumidores y usuarios.
En el ámbito del derecho civil, las cláusulas abusivas pueden encontrarse en diferentes tipos de contratos, como los contratos de compraventa, alquiler, financiación, servicios, entre otros. Por ejemplo, una cláusula que establece un interés desproporcionado en un préstamo o que limita los derechos del consumidor de forma excesiva puede considerarse abusiva.
La normativa española en materia de protección de los consumidores y usuarios, como la Ley General para la Defensa de los Consumidores y Usuarios y la Ley de Condiciones Generales de la Contratación, establece que las cláusulas abusivas son nulas y por tanto, no tienen efecto. Además, los consumidores y usuarios tienen derecho a solicitar la eliminación de estas cláusulas y a recibir una compensación económica en caso de haber sufrido perjuicios.