lesiones al volante

Evitar lesiones al volante

Tener una postura adecuada al volante es decisivo a la hora de evitar lesiones en la conducción. 

¿Qué precauciones deben tomarse para que su cuerpo no sufra mientras viaja en coche? Uno de estos consejos tiene mucho que ver con la primera lección que aprendemos cuando empezamos nuestras clases prácticas de coche en la autoescuela: el volante siempre tiene que sujetarse con las dos manos, de tal forma que las muñecas queden siempre en la parte superior del volante al estirar ambos brazos.

Además de la forma de sujetar el volante, no es menos importante la postura que adoptamos al sentarnos en el asiento. El respaldo juega un papel fundamental cuando hablamos de la postura al sentarnos frente al volante

Posición del asientoEs importante sentarse recto, quedando las nalgas y la espalda formando un ángulo recto y apoyados completamente en el asiento. Esto ayuda a evitar dolores de espalda, lesiones posibles y mantenerse alerta durante los viajes largos.

Con respecto a la distancia del asiento, debemos medirla pisando a fondo el pedal de freno y embrague y tener los talones apoyados en el suelo. Una pierna excesivamente extendida bloquea la rodilla; en una colisión esto reduciría el efecto palanca aumentando el riesgo de sufrir lesiones graves en el pie incluso el fémur podría proyectar el choque hasta la pelvis y la parte baja de la columna vertebral.

Una rodilla doblada excesivamente (cuando el conductor se sienta demasiado cerca) a un ángulo de aproximadamente 100 grados, no sostiene efectivamente al cuerpo y conlleva a una mala circulación sanguínea. También puede golpearse con el salpicadero en una colisión.

Regula el reposacabezas. Sitúelo tan cerca de la cabeza como sea posible (2-3 cm). Un reposacabezas ubicado a más de 7 cm aumenta el riesgo de un latigazo cervical. Asegúrese de bloquearlo bien y de abrocharse el cinturón de seguridad o restará eficacia a su acción.

Cinturón de seguridad. Debes llevar el cinturón bien ceñido al cuerpo. Es por ello que no debes utilizar pinzas o ropa demasiado voluminosa. La parte horizontal se coloca sobre el hueso de la pelvis, bajo el vientre, y la banda diagonal debe pasar por la clavícula, entre el cuello y el hombro.

Es muy importante conocer otro de los peligros que supone que un cinturón quede holgado; el llamado efecto submarino. Consiste en que el cuerpo, si no está bien sujeto por el cinturón, presiona el asiento hacia abajo y llega a deslizarse por debajo de la banda abdominal del cinturón de seguridad.

Esta situación es muy peligrosa pues deja que el cuerpo continúe su movimiento hacia adelante y, por ello, aumenta el riesgo de chocar contra el volante o el salpicadero pudiendo provocar lesiones en los miembros inferiores. Además. Permite que el cinturón presione sobre una parte blanda del cuerpo (el abdomen), lo que puede ocasionar lesiones internas graves.

Para evitar el efecto submarino debes colocar bien el cinturón y sentarte correctamente, siendo aconsejable no añadir ningún complemento al asiento.

Artículo elaborado por Ana Muñoz Guzmán

Fisioterapeuta Col. 7.015.

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